Recuperación de La Matanza

Monumenta, 9, 10 y 11 de diciembre de 2011

Durante este fin de semana se ha vivido, en Monumenta de Sayago, una experiencia que, a buen seguro, será inolvidable para todos los que hemos participado en ella.

Entre todos hemos conseguido recuperar este año la fiesta tradicional de “La Matanza”.


En esta fiesta han participado mayores, jóvenes y niños con gran alegría, inquietud y sorpresa ante este especial acontecimiento, en el que se han descubierto todas las laboriosas tareas necesarias para elaborar las distintas partes del cerdo y convertirlas en exquisitas viandas.

Los mayores se han mostrado encantados en rememorar otros tiempos, en los que en todas las casas, por estas fechas se mataba el cebón, se hacían los chorizos y las morcillas, se preparaba el tocino y los jamones para comerlos durante todo el año.

Muchos de los jóvenes, habían oído hablar de la matanza pero realmente no la habían visto nunca, y ha sido muy ilustrativo para ellos identificar cada paso y cada momento, para ver y valorar el cuidado de cada una de las tareas realizadas con mimo y con esmero por las manos expertas de los que han guiado estas jornadas en Monumenta.






Y qué decir de los más pequeños, con la boca abierta se quedaban ante el despliegue realizado y el movimiento de los abuelos y padres especialmente felices por recordar otros tiempos en los que en la víspera se realizaba el picado del pan para preparar los “chichos”.

Se ha evitado, en lo posible, el momento duro del sacrificio del animal, un momento espectacular es el chamuscado del cerdo, que se hacía con bálago, y que ha sido reemplazado por el soplete ganando efectividad y rapidez; a continuación se procedió al raspado y limpieza de la piel del animal, para pasar a su despiece.









Todos los participantes han disfrutado de estas jornadas, como evidencian estas fotografías, en las que los más pequeños han podido ayudar a preparar las morcillas y los chorizos, así como el resto de partes en las que se ha despiezado el cerdo.





Tras una mañana de sábado muy entretenida hicimos un alto para recuperar fuerzas y disfrutar de unas ricas patatas con bacalao preparadas para la ocasión, para continuar con un sabroso guiso de asadurilla, lomo y panceta a la brasa.







Por la tarde, se prepararon los chichos, se cocieron las morcillas, y se elaboraron los chorizos.





Hubo gran colaboración por parte de todos, y en todo momento los más jóvenes estuvieron dispuestos a echar una mano en lo que hiciera falta.



Y finalizamos el sábado, con una cena con todos los participantes en la que pudimos degustar costillas y picadillo y de postre los ricos chichos.



Durante estas jornadas, en las que todos los asistentes han participado activamente en las distintas tareas, se han vivido días de disfrute como si de una gran familia se tratara, en armonía y buen ambiente que quedará en la memoria de todos los que lo hemos disfrutado.

Todos hemos reído, hemos comido y bebido juntos, y sobre todo hemos conseguido recuperar esta tradición en Monumenta.

El deseo de todos, que el año que viene se repita.

¡Entre todos tenemos que lograr que Monumenta siga mejorando!